Sentados en la vida

Sentados en la orilla de la playa. Contemplando el hermoso ocaso abrazados como hermanos. Riéndonos de la distancia que nos separa por ratos. Conversando de las palabras que sentimos al mirarnos. Sintiendo nuestros labios condenándose a amarnos. Besándonos con ardor y al mismo tiempo envenenandonos. Envenenados de amor y de pasión. De ilusión y de razón. Llenando nuestros seres de lujuria sin envidia. Amándonos con perfección, sin ninguna misión. Pero con una oración incrustrada en el corazón para que cualquier otro la envidie: "Si mis labios no pueden decirte que te amo, quiero que mi corazón lo repia cuantas veces yo respire."

Acostados en la orilla de la playa. Acariciándonos como si fuera el ultimo amanecer. Las olas arropándonos, permitiéndonos saciar el deseo para cambiar todo nuestro parecer. Liberando nuestro amor con gemidos desnudos que salen de tu ser. Besando las raíces de tu hermosa piel. Haciendo milagros con solo creer. Creando grandezas que salen de nuestros querer. Predicar el amor con solo saber: saber conmover.

Volando por los aires. Con alas de un ángel. Amándote por tu grandeza. Deseándote por tu belleza. Queriéndote por tu destreza.

Sentados en una nube, brincando de una en una. Saltando con alegría por tenerte día a día. Sonriendo a cada segundo por ser tu la mujer que venero. Mirándote a los ojos y diciéndote que no me abstengo, de darte toda mi alma hasta la que no tengo.

"Te Amo" es una palabra digna en nuesto diccionario. Nos abrazamos y sentimos nuestras almas en una sola. Ligada con la ola pidiéndonos que la oiga. Que la oiga decir: "Ese es; el gran porvenir."

Como un ángel en un vestido blanco. Mojándose en la lluvia de la ola prodigiosa. Sacando las almas milagrosas para volar por los aires del portal hacia el paraíso. Haciéndome viajar con el destino como un delfin sin camino. Sin miedo a descubrir un nuevo mundo llamativo. Llamativo, por sus hermosas razones de existir y de vivir. De sentir y de rendir.